Nos duele por muchas razones que, bajo el trabajo de las palabras no expresarían lo que emocionalmente sentimos nosotras, nosotros que tratamos de construir otro mundo posible. Nos duele porque Berta representa la mejor de las cualidades de los defensores ya no sólo de los derechos humanos, sino porque en sus acciones esa semilla de rebeldía, de justicia, de amor se propagó alrededor de cientos, de miles que directa o indirectamente conocimos su lucha y la hicimos nuestra. Nos duele porque sabemos que las autoridades no harán nada para esclarecer este asesinato, porque su lucha y la lucha del COPINH tiene un tinte político y no el cerco mediático que el Estado hondureño quiere hacer prevalecer. Porque la gran defensa del territorio lenca significaba recuperar lo que a los pueblos les pertenece y no lo que en la “legalidad” sólo es un proyecto capitalista, destructor. Los Estados en su afán por la cooptación de recursos primarios, proyectos expansionistas que reflejan el verdadero rostro de las democracias representativas. Porque el asesinato se da en diferentes niveles: desde la resistencia, el odio a los pueblos indígenas, a los actores sociales dispuestos a organizarse y hacer frente a la “hiedra capitalista”.  Nos duele Berta porque no estás más con nosotros, pero también esas palabras que nos dejaste siguen ardiendo como nunca antes:

“En nuestras cosmovisiones somos seres surgidos de la tierra, el agua y el maíz, de los ríos somos custodios ancestrales el pueblo lenca. Resguardados por los espíritus de las niñas que nos enseñan que dar la vida de múltiples formas por la defensa de los ríos es dar la vida por el bien de la humanidad y de este planeta”.

Desde el Centro Comunitario Martín-Baró nos solidarizamos con la familia de Berta, amigxs, compañerxs y colectivos vinculados al proyecto del COPINH y también pedimos a las instancias pertinentes lo siguiente:

Esclarecimiento de la muerte de la compañera Berta Cáceres Flores.

Justicia y presentación de los responsables sean nacionales o internacionales y juicio por crímenes de lesa humanidad.

Cese al hostigamiento de las comunidades lenca por parte del Estado de Honduras.

Garantizar la seguridad de la familia de la compañera Berta Cáceres Flores.

 

¡Berta Cáceres Vive!

Y vamos a triunfar, como lo dijo el río.